¡No te líes! 6 Consejos para firmar un contrato de alquiler

El alquiler de cualquier tipo de inmueble o vivienda puede convertirse, en ocasiones, en una misión imposible o en una mera travesía por el desierto. Lejos de que algo así pueda ocurrirte o parecerte, desde Arrentum, queremos proponerte una serie de consejos que te permitirán enfrentarte a cualquier situación contractual de esta índole de una manera eficaz, e incluso, gratificante.

Conocer el inmueble o vivienda en profundidad

Debes visitar el inmueble que desees alquiler. Para ello, habrás de revisar el estado en el que se encuentra la vivienda, comprobar si responde o adecúa a tus propias necesidades, observar el entorno y los equipamientos o servicios que te ofrece la zona (redes de transporte cercanas, mercados, tiendas, centros de salud, escuelas, parques…).

No aventurarse a firmar contrato alguno antes de tiempo

Queda totalmente prohibido que, antes de firmar el contrato de alquiler, te adelantes a firmar o realizar pago alguno. En este sentido, es vital la fase inicial de lectura del contrato y de sus respectivas clausulas adicionales. Recuerda que si algo no te encaja, habrás de negociar con el propietario tratando de llegar a alcanzar acuerdos intermedios, especialmente, en materia de las contraprestaciones a las que os veáis obligados.

Condiciones de los servicios básicos y coberturas de seguros  

Antes de alquilar cualquier inmueble o vivienda y culminar el proceso con la firma del contrato deberás conocer los servicios básicos (luz, agua y gas) u otros servicios (telefonía, Internet) que se te ofrecen y si estos correrán por tu cuenta o por la del propio arrendador. De no ser así, tendrás que proceder a las altas de los servicios, cambiar la titularidad y gestionar la domiciliación bancaria. De igual modo, tendrás que conocer de antemano la disponibilidad de seguros contratados para el inmueble o vivienda y qué coberturas ofrecen. Exige justificantes o comprobantes de pago en caso de que seas tú el que pagues los servicios a tu propietario.

Datos que no deben faltar en el contrato

Has de tener en cuenta que en cualquier contrato de alquiler ha de figurar los siguientes datos: identificación y referencia catastral del inmueble o vivienda, datos personales del propietario, descripción de la vivienda, cantidad anual de la renta así como la cláusula anual de actualización (en este sentido conviene pactar tanto la anual como la de actualización para hacer frente a tus obligaciones como inquilino), duración y la forma de pago del alquiler.

Enterarse bien de la fianza, gastos de servicios, reparaciones

En el contrato de alquiler, además, ha de figurar cuestiones relativas a la fianza, exigencia de aval y negociar aquéllas condiciones que os sean favorables tanto arrendatario como arrendador en este sentido. Incluso, pactar a quién compete acometer las reparaciones del día a día.

Todo atado y bien atado

Por último, has de haber leído todas y cada una de las condiciones que figuren en el contrato de alquiler del inmueble o vivienda, incluso, hasta la letra pequeña que tanto cuesta leerse. Sí en algo discrepas, habrás de consensuar acuerdos con el propietario. Tras ello, ya estarás en disposición de firmar el contrato. Piensa que todo lo que no figura en contrato, ante cualquier problema, puede ser contraproducente. Así que, todo atado y bien atado para que no tengas quebraderos de cabeza con tu alquiler.