La clave para un buen trabajo y el éxito de una franquicia pasa por tener una buena relación entre franquiciado y franquiciador. Si quieres triunfar en tu negocio y además consolidar tus relaciones, atento a los pasos que tienes que dar.
Comunicación
Una buena comunicación bidireccional es esencial. Es importante que mantengas las vías abiertas y que puedas exponer al franquiciador todas aquellas dudas o problemas que puedas tener, para que conjuntamente las resolváis. Si existe una buena comunicación entre las partes, tienes garantizado que una parte de tu negocio funciona bien.
Legalidad
Que todo siempre esté por escrito y que vengan reflejados los deberes y derechos de ambas partes. Es importante leer detenidamente los contratos y que se expongan las dudas que puedan surgir antes de firmar.
Sistema de conflictos
Es muy aconsejable pactar un sistema de resolución de conflictos que evite el enconamiento de los mismos y que además permita que se continúe trabajando mientras se soluciona el problema.
Cordialidad
Cuando hablamos de cordialidad, queremos haceros llegar el respeto entre franquiciado y franquiciador. Seguir las directrices que fija la marca, mejorar y crecer junto a ella, trabajar conjuntamente…
Sigue estos criterios de buena praxis y favorecerás el acercamiento y entendimiento entre los dos agentes: el franquiciador que ofrece una opción de negocio bajo una firma consolidada y el franquiciado o emprendedor que se incorpora a la misma.