Alquiler y comunidades de vecinos no es una cuestión incompatible. Muchos nos confirmáis que, en esta materia, andáis más perdidos que otra cosa. Pues bien, para salir de ellas, desde Arrentum os desvelamos un par de claves para conocer a fondo las comunidades de vecinos y, en este sentido, exponer las limitaciones entre propietario e inquilino….Vamos, como para salir de dudas…
Pago de la cuota
Es la pregunta clave y, hasta en ciertos supuestos, el interrogante trampa a la hora de gestionar el contrato de arrendamiento.
El pago de la cuota de la comunidad de propietarios, salvo que en alguna clausula específica del contrato de arrendamiento se concrete lo contrario, le corresponde ser asumido por el propietario.
Al respecto, el inquilino queda eximido de tal responsabilidad…tan sólo, la única excepción que se prevé para 2017 es que, al cambiar la normativa sobre calefacción central -y pese a que actualmente se incluyen en el precio de la comunidad-, el inquilino pasará hacerse cargo de ello. Pero, hasta entonces, y salvo esta particular excepción, queda desentendido de asumir el coste de la comunidad de vecinos.
Reuniones `de patio´ de vecinos
Según recoge la Ley de Propiedad Horizontal, a las reuniones de vecinos corresponden asistir a los propietarios en sí, no a los arrendatarios.
Ahora bien, el inquilino podría acudir a las mismas, siempre y cuando su presencia estuviese motivada en ellas en calidad de representante directo del casero y bajo firme autorización expresa, que en este caso tendría derecho a ejercer tal representación con voz y voto.
Sobre el respeto
En este sentido, nos referimos a que todo inquilino debe de mostrar un trato respetuoso en el empleo o utilización de todas las zonas comunes y no sólo eso, sino que, en la medida de lo posible, se ha de prever un comportamiento ejemplar en todas y cada una de ellas.
El cuidado de los espacios comunes ha de ser una responsabilidad en su hábito de convivencia, con todos aquellos con los que comparte su uso. Hay que evitar generar problemas añadidos, ser respetuoso con los elementos y mobiliarios comunes, utilizar las papeleras y los contenedores de basuras de manera adecuada, etc. Y, por supuesto, pedir permiso si se necesita emplear algún espacio común.
Cauces adecuados
Ante cualquier imprevisto o problema se recomienda dar parte al presidente de la comunidad de vecinos o a la persona del administrador. Conviene, en este sentido, informarse de quiénes ejercen tal responsabilidad. Así, ante cualquier duda o incidente podrás saber a quién has de dirigirte desde un primer instante.
Desde Arrentum, creemos que estas son las cuestiones más principales. Si tienes dudas, no tienes nada más que consultarnos. Aunque, lo más importante, pasa por recordar que una buena convivencia comienza siempre por dispensar el trato más amable y respetuoso hacia los demás